Es mi deseo más profundo y sincero, que durante estas fiestas de Año Nuevo, ocasión en que las familias se reúnen en torno a la mesa, para recibir el 2018 con alegría, pero por sobre todo con la esperanza de que será un año mejor para todos, se les cumplan todos aquellos anhelos que aún esperan y que no se han podido concretar. También espero que esta nueva etapa sea buena y generosa en la salud, el trabajo, la armonía entre todos, y pletórica de logros.
Durante el año que ya se despide, espero que los bulnenses hayamos disfrutado de nuestros seres queridos, de nuestros logros, de la sencillez de la vida sin ostentación y del milagro que es poder vivir momentos únicos e irrepetibles, esos que la vida nos regala a manos llenas cada día. -Espero también que cada uno haya reflexionado sobre los momentos que vivimos con los que hoy ya no están con nosotros, con toda la gente que ha partido, y con los que seguramente se compartieron muchas historias de alegría y felicidad.
El 2017 fue sin duda un año de muchas oportunidades, y también de muchas lecciones aprendidas. Como país vivimos situaciones muy adversas, sobre todo en el pasado verano, pero con unidad las enfrentamos y salimos airosos. Hoy la vida nos da otra oportunidad, y esperemos que este nuevo año se nos presente abundante y generoso, para que cada uno de nosotros podamos recorrerlo sin grandes sacrificios y obtengamos de él todas aquellas cosas que aún esperan en nuestro pensamiento, en lo más profundo de nosotros.
Este año que se va, Bulnes ha vivido, aprendido y crecido. Los cambios decididos por el país y su gente son inminentes, sin embargo, deseo que este 2018 prime la unidad, el criterio, el respeto, y un genuino sentido de servicio público, ese que construye con el otro, y respeta lo ya avanzado.
Por mi parte, les pido no perder de vista las cosas fundamentales que mueven nuestras vidas. Vivir este año 2018 al máximo, amar mucho y bien, aprender mucho y bien, compartir sin ninguna limitante, dar la mano a quienes han elegido a Bulnes como su segundo hogar, y cuyo país se encuentra muy distante. Los invito a creer en nuestra ciudad, en nuestro país, y en nosotros mismos. Todos deben ser un aporte a nuestra comuna, y eso se logra con unión, y con tolerancia.
Reciban por parte mía y de toda mi familia, el más afectuoso y sincero abrazo de Año Nuevo. Nuestros mejores deseos para todos ustedes, que sea un año de salud, de felicidad, de esperanza, de unidad y de mucho orgullo, ya que nuestro querido Bulnes, este 2018 será conocido como la Capital del Diguillín y eso es un logro trascendental que hemos tenido la suerte de vivir.
¡Feliz y próspero año 2018 querida comuna de Bulnes!
Jorge Hidalgo Oñate
Alcalde de Bulnes
Columnista de El Examinador.cl
